Monday, November 21, 2011

¿ESCOGENCIA DIVINA O MEGALOMANÍA?

Con respecto a la columna sobre Angel Mesías Rodriguez, hay varios comentarios que creo que vale la pena responder. En primer lugar, parece que hay lectores que leen incompleto... o tal vez leen lo que quieren leer: en ningún caso he criticado ni las aptitudes ni los méritos de Miguel Angel. No tengo dudas de que es un gran jugador de squash, sin lugar a dudas el mejor que ha tenido Colombia hasta el presente, y uno de los mejores de Sur América. Y también creo que es un magnífico muchacho: disciplinado, talentoso, educado, decente, correcto en su proceder y actitudes.
Pero ese no es el tema de la columna. El tema de la columna es el carácter y manejo de situaciones deportivas por parte de Angel Mesías Rodríguez en su calidad de entrenador nacional, y su entrega, casi exclusiva, durante esos mismos años al entrenamiento de su hijo Miguel Angel, así como el uso de sus prerrogativas como entrenador nacional el servicio de la carrera de su hijo. En el fondo tengo la impresión de que no hay mucha diferencia con la forma como Tere de Samper o Raúl Vargas manejaron sus posiciones de servicio público para desarrollar el talento de sus hijos. Y no tengo dudas del inmenso talento de Nano Samper tampoco, ni de su disciplina o calidad humana. Tampoco de los dos muchachos Vargas, dedicados, disciplinados y talentosos desde niños. No, no es esa mi crítica. Mi critica, insisto, va a algo más profundo: va al hecho indudable de que en estos tres casos las posiciones de servicio público de los padres se pusieron al servicio de sus hijos con descuido y en detrimento de otros talentos posibles. Tan es así, que la situación en que deja Vargas al Squash Colombiano solo puede calificarse como lamentable. En mi opinión esto obedece al sistema impuesto en el squash desde el comienzo, en el cual los directivos (casi todos, porque eso era lo normal) buscaban estas posiciones para el beneficio de sus hijos. O el propio. Este fue el caso, aunque a algunos irrite el comentario, de Sergio Rodriguez, Martha Luz Vega, Tere de Samper, Raúl Vargas, etc, y, nos nos digamos mentiras, Angel Mesías Rodriguez.
Así sea el padre de Miguel Angel.
Por otra parte creo que las cosas deben llevarse a sus verdaderas dimensiones: Miguel Angel es un gran deportista... en un deporte muy pequeño. Qué le vamos a hacer pero es mejor aterrizar. El comentario de su madre en este Blogg en Noviembre 14 nos informa que parte (por lo menos) del éxito de su hijo se debe a escogencia Divina. ¿Un poco mesiánico el comentario? ¿O solo megalómano?
Y yo que tengo la impresión de que Dios no se mete mucho en estos asuntos. ¿O será que brasileños, argentinos o alemanes son el nuevo pueblo elegido?
Pues digo, por lo del fútbol.







6 comments:

CLARA said...

Antonio,
A que comentario de la mamá de Miguel Angel hace referencia?

Antonio Torres said...

Constanza Forero, comentario Nov 14 a la columna sobre Angel Mesías Rodríguez

Anonymous said...

Antonio,
Estoy de acuerdo con muchas de las cosas que usted escribe pero en esta ocasión tengo que decir que Constanza no está equivocada al decir que además de la disciplina se necesita tener un don...bueno para que no sueno tan salido de tono digamos una facilidad... y es que unos nacen con facilidad para las matematicas, otras para el canto, otras para la actuación ,etc..claramente hay algunos (as) como Miguel a quienes se les facilita el squash y aprovechan.....Claro que seguramente van a pensar...pensamiento de madre...pero lo creo firmemente: los dones son repartidos entre todos pero no todos somos buenos para lo mismo...

CLARA said...

Aclaro que el comentario es de mi autoria...CLARA...que pena que se me salga el sentido materno de esta manera...

Antonio Torres said...

Hola Clara:

Creo que estoy de acuerdo con ud en lo de los dones, así como en que los sentimientos maternos son válidos. De todas formas en el comentario y actitudes de Constanza hay cierta dosis megalómana que tiende a cegar, entendible dadas las circunstancias.
Aún así, dicen que la soberbia humilla... y la humildad engrandece.

Anonymous said...

Y "Dios" nunca se acuerda de los pobres cuando de repartir dones se trata, cuando "Dios" se puso a repartir dones a ver quien iba a ser el mejor jugador en cada deporte en Colombia nunca se le ocurrió repartir el don al mejor squashista, tenista, golfista, piloto (carreras), motociclista, basquetbolista, nadador, etc. entre las clases bajas. Porque ??
Esperemos que algún día "Dios" decida que los pobres también pueden ir al cielo y los empiece a bendecir con sus dones.